¿En qué consiste la rotura uterina ?
Lo cierto es que la ruptura uterina durante el embarazo no es muy común. Sin embargo, es una complicación del embarazo que de darse ha de ser tratada de manera urgente. El motivo no es otro que podría llegar a causar la muerte de la madre y del feto.
El útero puede romperse durante el embarazo o en el parto. La ruptura uterina es más frecuente en mujeres embarazadas que hayan tenido intervenciones quirúrgicas previas en la zona del útero, ya que su estado es mucho más débil. También puede darse este caso en embarazos múltiples donde la cantidad del líquido amniótico es mayor, en partos en los que la posición del bebé no es correcta, por lo que ha de ser girado o en los trabajos de parto prolongados en los que se fuerza en exceso el útero.
La rotura uterina puede ser de varios tipos:
- Completa.
- Incompleta o dehiscencia.
- Espontánea.
- Pasiva.
- Activa.
- Lateral.
- Vaginal.
- Cervical.
- Mixta, etc.
Riesgos de la rotura uterina en la mujer embarazada
La rotura del útero en el embarazo es una complicación grave que debe ser tratada de forma inmediata mediante un tratamiento quirúrgico de urgencia consistente en una histerectomía parcial o total del útero.
¿La rotura uterina puede impedir un nuevo embarazo? Una mujer que ya haya tenido una rotura uterina podría quedarse embarazada a no ser que se le haya extirpado la totalidad de su útero. El embarazo es posible tras una rotura uterina. Lo que ocurre es que puede complicarse hacia el tercer trimestre del embarazo, la última fase del estado de gestación.
Si has sufrido una ruptura uterina y te has quedado de nuevo en estado tu médico llevará un control meticuloso de tu periodo de gestación. Por otro lado, una vez llegado el momento del parto se te hará:
- Una monitorización fetal continua.
- El control de la dinámica uterina (preferentemente mediante catéter intrauterino).
- Evitar la prolongación excesiva del parto (ayuda instrumental si es preciso).
- Una valoración clínica del sangrado postparto.
Entre los riesgos que asumes ante un nuevo embarazo tras una rotura uterina son:
- Una nueva ruptura del útero antes de la semana 36 provocando un parto prematuro con sus consecuencias.
- Limitaciones de crecimiento del bebé dentro del vientre materno. Esta complicación llevaría a la programación de un parto antes de tiempo.
- Peligro para la salud de la madre.
No obstante, hoy día la medicina ha avanzado considerablemente en este sentido. Si te quedas nuevamente embarazada tras haber sufrido una rotura uterina se considerará tu embarazo como de alto riesgo. Esto implicará que tendrás que llevar un ritmo de vida reposado, así como unos controles médicos más regulares.
Si quieres quedarte embarazada tras una rotura uterina es importante que antes hables con tu ginecólogo para que te haga una exploración total y valore tu estado. Él mejor que nadie sabrá si es recomendable que intentes un nuevo embarazo, ya que éste podría llegar a ser peligroso para tu salud. En caso de que puedas llevar a cabo una gestación tras una rotura uterina previa ésta ha de ser controlada en todo momento. Sobre todo, durante el último trimestre de tu embarazo.