¡Hola chicas!

Os quería contar lo que me pasó el domingo. No os preocupeis porque todo está perfecto, pero me llegué a asustar un poco.

Resulta que el sábado después de cenar al volver a casa noté que llevaba manchado el salvaslip. Había manchado un poquito, pero no le di importancia. Luego al limpiarme el papel salía un poco rosita, pero era rosita claro y poca cantidad.

Decidí esperar a ver qué pasaba si seguía manchando o se cortaba.

El domingo las cosas seguían igual, manchaba muy poco (a penas se manchaba el salvaslip) pero cada vez que hacía pis y me secaba con un papel salía un poco de flujo rosita.

Como después de comer seguía igual, decidimos ir a urgencias porque estaba un poco preocupada. Mi niño se seguía moviendo como siempre, pero toda precaución es poca.

Fuimos a San Juan de Dios. Me llamaron en 10 minutos, por esa parte genial. Muy rápidos en atenderte (menos mal porque había un grupo de gente con un bebé que estaban contando peripecias del parto y me estaba poniendo mala de oirlos)

Total que me hacen tumbar en la camilla, me ponen las correas y hasta ahí todo bien. El corazón se oia perfectamente y mi niño estaba muy bien según me dijeron.

Lo malo fue cuando vino el tacto… Querían ver si estaba dilatada (y yo sorprendida diciendo ¡¡si estoy de 7 meses!!) pero bueno, se empeñaron en que había expulsado el tápón mucoso y en que me iban a mirar si había dilatado.

Me asustaron porque a mi me parecia muy pronto para expulsar el tápón. Les insistí en que era muy poca cantidad y como flujo, no se qué cantidad ha de ser el tapón, pero vamos yo ni lo había pensado.

Total que la comadrona que me hizo el tacto me hizo ver las estrellas. Cuanto más me dolía más tensa me ponía y aún me dolía más.

Encima para nada porque no llegaba al cuello del útero y no sabía si estaba dilatada o no, que lo tenía muy atrás. Lo intentó dos veces. Luego vino otra que lo intentó también y después de un rato me dijeron que vendría un compañero a mirarme (supongo que como ellas no llegaban habían buscado a alguien que pensaban que podía llegar)

Empezaron a hablar entre ellas, que si el tapón, que si iban a buscar el historial por si me ingresaban, vamos que ya me vi por momentos ingresada y de parto (cosa totalmente absurda, porque ni contracciones ni ningún síntoma, pero ellas a lo suyo)

Yo allí en la camilla esperando que viniera quien me fuera a mirar,pensando en que me iba a doler otra vez… bueno, un rollo.

Luego me dejaron abandonada en la camilla durante mucho rato. De vez en cuando venía una a ver qué tal estaba pero no me hacían nada.

Estuve como hora y media o más y los últimos 3 cuartos de hora no me hicieron nada. Incluso ya no venía nadie, yo las oia hablar, de que si se iban a ir a merendar, que si madalenas de chocolate, o también hablaban de tíos, que si este está bueno, que si el otro no se que y yo en la camilla ahí esperando.

Al final oi a alguien que les preguntaba y me pareció que era mi marido. Llevaba casi dos horas fuera sin saber nada el pobre.

Entonces ya vino una y me dijo que la acompañara a otro sitio que me iban a hacer una eco.

Entonces vi al ginecólogo, que me hizo una eco vaginal y otra abdominal. Me dijo que todo estaba bien. Yo le pregunté por el tapón mucoso y me dijo que no, que había perdido un poquito de sangre pero que no era el tapón.

También le pregunté si con la eco ya veia lo de si estaba dilatada y me dijo que tranquila, que si no llegaban a mirarlo era porque estaba muy atrás y de dilatada nada.

Me hubiera gustado que me enseñara a mi bebé, pero tenía la cortina corrida en el trozo de la pantalla de la eco y no vi nada.

Al menos me quedé tranquila, todo estaba bien y me dijo que a no ser que sangrara, me notara pérdida de líquido o contracciones que no me preocupara. Si me pasaba algo de eso que fuera.

Me dio rabia porque me hicieron mucho daño total para nada ¿no me podrían haber hecho una eco ya desde el principio?

Encima me asustaron con sus comentarios, que por lo que veo no tenían ningún fundamento…
A mi marido le dijeron que tenía que estar en correas por si estaba de parto… y él flipando, claro….

Enfin, que a veces te asustan en vez de tranquilizarte.

Muchos besos