Hay que darse cuenta que el “mundo no se acaba” por no concebir un bebé de forma natural, que existen otras alternativas. Y es en ese momento, cuando encontrar expertos profesionales en tratamientos de reproducción asistida es decisivo.
Hay que ser conscientes que el mundo de la reproducción asistida es inmenso, por eso la decisión que marcará todo el proceso es, sin duda, la elección de profesionales de calidad, que busquen resultados de éxito y no únicamente el beneficio económico. Por ello algunos centros ofrecen una primera sesión gratuita, porque la información no tiene precio.
Es el caso de Sanitas, cuyos expertos aconsejan a menores de 35 años acudir al ginecólogo después de un año de intentarlo, y a aquellas que sobrepasen esa edad, a los seis meses, pues esa es la frontera de edad en la que la salud reproductiva comienza a deteriorarse en la mujer (la del hombre ronda la década de los 40).
Por último, el ser constante es necesario durante el tratamiento de reproducción asistida, es un proceso largo que no siempre resulta exitoso en el primer intento. Lo importante es contar grandes profesionales para hacerlo más llevadero, más seguro y personalizado. Para ello hay que buscar un centro donde se combinen excelencia médica y trato inmejorable.