Lo normal es que tanto si tu pareja es un hombre como si es una mujer la reacción que se tiene tras saber que:
- Todas las ilusiones que se habían puesto en un tratamiento
- Todo el dinero empleado
- El tiempo invertido
- Todo la salud desgastada
- Los nervios destrozados
- Todo el stress para que en tu trabajo no se den cuenta
- Los días de vacaciones gastados
- Las terapias hechas
- Whatsapps, llamadas, mails, foros
- Todos los ánimos, las sonrisas y las lágrimas
sólo ha traído una beta negativa, va a dar la vuelta a tus creencias, máxime en un mundo como el actual en el que si uno ACTUA—–>LOGRA
Desde luego en reproducción asistida esta secuencia no es una excepción, lo que pasa es que muchas veces tardan ocurrir y ya no sabes en qué creer ni en quién confiar.
Dudas hasta de tu objetivo incluso teniéndolo muy, muy claro porque a veces la sensación es casi de que nos estamos haciendo daño a nosotros mismos:
Además siempre hay personas que se van a encargar de recordártelo. ¿Te suena?
Es tan personal la sensación de medicarse para tener más óvulos o que te transfieran un embrión y que sea tu cuerpo el digámosle responsable de que se quede o no (luego sabemos que hay mil cosas que influyen).
O por ejemplo, los síntomas que vas teniendo o no durante la betaespera, ese ir y venir al baño para ver si tus bragas están manchadas o no…
¡Hay que vivirlo para entenderlo!
Y tu pareja aunque haya estado contigo, aunque lo haya sufrido contigo, no está en tu cuerpo, no está en tu cabeza y no puede ser lo mismo.
¿Como lo vivís vosotros? Me gustaría mucho que lo compartieras con otros lectores del blog. Todos aprendemos y aplicamos