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Testimonio de Elisabeth: La naturaleza a veces es MÁGICA



Hola a todos, os cuento mi historia porque, por experiencia, sé que estáis pasando por momentos difíciles en los que saber que la naturaleza es mágica, lo cambia todo; todo es posible. 

Mi marido y yo deseábamos más que nada ser padres, lo intentamos durante dos años y nada, así que nos pusimos en manos de “expertos”. Nos hicieron todo tipo de pruebas y llegaron a la conclusión de que no podíamos tener familia por los medios ordinarios. Mi marido tenía los espermatozoides vagos y de poca calidad y yo las trompas obstruidas. Vamos, que los médicos dijeron que si no era con fecundación in-vitro, nada. Como la mayoría de las parejas en nuestras condiciones nos pusimos manos a la obra con la fecundación in-vitro y todo lo que esto supone. De la primera no me quede embarazada, de la segunda si!!! Felicidad total; a las 18 semanas lo perdimos por una incompetencia cervical… Se nos vino el mundo encima, pero la vida sigue y no nos dábamos por vencidos. Hicimos otra in-vitro y nada. 

Pasamos casi un año amargados, tristes y desilusionados, lo que para otros era tan natural, para nosotros era un auténtico suplicio. Yo había puesto una tienda de niños hasta cuatro años y premamá, curioso, no? pues sí, el subconsciente…

Un día estando en la tienda, una clienta que es ginecóloga y una GRAN MUJER me comenta que porque no nos hacemos nuevas pruebas en otro centro, que no perdiera la esperanza, y le hice caso. Fuimos a hacer las pruebas. Los médicos nos dijeron que, en efecto, la situación era complicada pero no imposible; de hecho, el médico me dijo a mí y a mi marido medio en broma “como estáis ahora si os ponéis igua”- Mi marido le dijo: “mire doctor, si ahora después de todo lo que hemos pasado usted me dice que con un polvo se queda embarazada… vamos!!! – y todos nos reímos, pero el medico dijo una gran verdad: “Esto no es una ciencia exacta”. 

Días más tarde nos reunimos con los médicos para decidir qué hacer. Nosotros estábamos muuuuy cansados de todo, y le comunicamos nuestra decisión de no seguir intentando tener familia, teníamos la necesidad de vivir y disfrutar de la vida y de nosotros mismos. Esto fue en el mes de octubre. Ese año, por fin, después de mucho tiempo, nos pedimos con las uvas tener un hijo.

En marzo, un día, en una comida familiar, discutí con mi cuñado (lo cual es lo más raro del mundo),  y me dijo: “joder, ni que estuvieras preñada, estás insoportable”. Yo no le di mayor importancia y me fui a trabajar a mi tienda. Al rato de estar en la tienda me acorde de lo que me había dicho, y pensé que algo rara sí que estaba, y una luz de esperanza se encendió en mí. En la tienda tenía unos predictor que me mandaron por error los de Chicco, así que cogí uno y me fui al baño, y en unos minutos me estaba cambiando la vida… POSITIVO!! no me lo creía, hice otro… POSITIVO!!. Como no me lo podía creer, cerré la tienda y fui a la farmacia a comprar un predictor, los que yo tenía en la tienda, estaban mal, seguro. Devuelta a la tienda esperé a tener ganas otra vez, lo que no tardaría en pasar porque yo estaba atacada con todo lo que estaba viviendo. Y otro POSITIVO!!, ya casi convencida pero con miedo a llevarme una desilusión, llame a mi marido y le dije que viniera a la tienda que era urgente, cuando llego y me vio tan nerviosa pensó que estaba pasando algo malo: ¿que pasa? Dime!. Le enseñé los predictor y no se lo podía creer. Fue a la farmacia, compró dos predictor y yo me hice otro. Él hizo dos, uno con los de la tienda y el otro de la farmacia. El mío POSITIVO!!, los suyos NEGATIVOS!!

ESTABAMOS EMBARAZADOS!!!! SIN HACER NADA MAS QUE…..disfrutar el uno del otro sin más.

No fue un embarazo fácil pero todo salió bien. Hoy nuestro niño tiene cinco años y es lo más bonito del mundo.

Llevo pensando en escribir esto desde que nació, hoy por fin lo escribo.

Espero que sirva para dar esperanza otras parejas que pasan por estas situaciones en la vida. No somos los primeros ni los últimos que viven experiencias positivas como esta.

 

Disfrutar de todo, un beso

Gracias