Estudios aseguran que actualmente “más del 30 % de los ciclos de fecundación in vitro (FIV) precisa de diagnóstico genético implantacional”, una técnica que permite estudiar el ADN de los óvulos o de los embriones para seleccionar los que cumplen las características adecuadas.
El informe indicó que la edad media de las pacientes de reproducción asistida del Hospital Universitario Dexeus (España) ha pasado, desde 1995, de 35 a 39 años.
Asimismo, el trabajo afirmó que 40 % de las mujeres que apuesta por la FIV en este centro requiere óvulos de una donante, mientras que hace quince años esta técnica solo se aplicaba en el 4 % de los casos.
Los investigadores han recordado que España es el país europeo en el que se hacen más tratamientos de ovodonación, una cifra que equivale al 50 % de todos los que se practican en Europa, según datos publicados por la European Society of Human Reproduction and Embryology (ESHRE).
El director del centro Salud de la Mujer Dexeus, el doctor Pedro N. Barri, ha explicado que desde el nacimiento en 1984 de Victoria Anna Perea, la primera persona concebida a través de FIV en España, ha habido “un cambio radical en el perfil de las pacientes que recurren a estas técnicas, así como en los motivos que les llevan a hacerlo”.
Barri ha afirmado que al principio la paciente que acudía al centro sanitario para que se le aplicara la FIV era una mujer de unos 30 años, con pareja, que tenía problemas de fertilidad, mientras que el perfil actual es el de una mujer de 39 años de media que “padece esterilidad por problemas asociados a su edad avanzada”.