Este estudio comenzó porque varios investigadores se han preguntado acerca de la finalidad del orgasmo femenino en los seres humanos, ¿se trata realmente de solo placer o tiene otra una razón de ser?
Existen dos hipótesis al respecto sobre cómo el orgasmo femenino puede ayudar en el embarazo. La primera dice que el propósito del orgasmo en las mujeres es para que se sientan relajadas y con sueño, de forma que se acuesten después de sexo, lo que ayuda a que los espermatozoides lleguen a su destino con mayor facilidad y mejora la retención de esperma. Aunque otros estudios comentan que el acostarse después de las relaciones, no está relacionado con lograr un embarazo. Pero otros estudios demostraron que las mujeres se acostaron después de la inseminación tenían más probabilidades de concebir.
La otra es una teoría llamada “upsuck” o pro-succión, donde explica que las contracciones del útero “chupan” el semen que se deposita en la vagina, cerca del cuello uterino y el orgasmo ayuda a mover el esperma a través de los tubos de Falopio y el útero. Un estudio midió cuánto semen se filtra después del sexo y encontró que cuando se produjo el orgasmo femenino un minuto o menos antes de la eyaculación masculina, la retención de esperma fue mayor y además, esta retención fue mayor cuando la mujer tenía un orgasmo hasta 45 minutos después de la eyaculación masculina y la falta de orgasmo femenino, disminuye la retención de esperma. Así que se comprobó que existen más embarazos cuando hay orgasmo, pero no se pudo definir en qué medida.